LA COPA DE BULLAS
Cuenta la leyenda que en la época en que los Templarios ocuparon la villa de Bullas y aprovechando que el río Mula pasaba muy cerca de su castillo, construyeron algunos molinos.
Curiosamente, muy cerca del lugar que hoy se llama "Castillico", donde los templarios tuvieron su fortaleza, aún se conservan denominaciones alusivas a la presencia de molinos.
Por estos parajes se pueden encontrarse enclaves como el "molino de Enmedio", "molino de arriba", "molino de abajo", "molino de Sebastián"...entre otros.
Sigue refiriendo la leyenda quebranta harina de molía que el comendador templario mandó construir un almacén apartado para guardar la harina que no cabía en los pequeños molinos. Dicho lugar fue bautizado con el nombre de "La Copa" aludiendo con ello al simbolismo eucarístico que se desprende de las palabras del Evangelio: "Por tanto, examínese cada uno a su mismo y coma del pan hecho del trigo y beba de la Copa que contiene al vino", y para evitar que los saqueadores se llevaran la harina almacenada, el comendador ordenó que permaneciese allí un retén de vigilancia día y noche.
La gente al ver que los Templarios dispersaban una vigilancia tan rigurosa para un lugar tan apartado y solitario, comenzó a decir que tenían algún tesoro allí escondido . Eran tiempos del romance del Grial.
Bajo estos auspicios, la leyenda fue haciéndose cada vez mayor y extendiéndose por todos los pueblos de España. Todavía hoy hay quien cree, a pies juntillas, que en Bullas se conserva una gran Copa llamada "Copón" que fue el Correo que Jesús utilizó en la Ultima Cena.
Desde entonces, la literatura, la tradición y los consejos populares han ido dejando en la historia señales de esta confusión la de mezclar los distintos orígenes entre los términos Copa y Copón como si se tratara de una indiscutible certeza.
Fuente bibliografica:
www.regimurcia.com
www.regimurcia.com
JM
