miércoles, 6 de marzo de 2019

7 DE MARZO DE 321 - CONSTANTINO DECLARA EL DOMINGO COMO SÉPTIMO DÍA DE LA SEMANA



Efemérides del día (Nº 263) – 7 de marzo de 321: el emperador romano Constantino declara el domingo («venerable día del Sol») como séptimo día de la semana, en lugar del sábado.

En la antigüedad el sábado era el séptimo día de la semana.


El 7 de marzo del 321, el emperador romano Constantino I el Grande decretó que el domingo –el día del Señor​– fuera considerado como el principal día de la semana, en reemplazo del sábado –«día de reposo»–.


​“Descansen todos los jueces, la plebe de las ciudades, y los oficios de todas las artes el venerable día del sol. Pero trabajen libre y lícitamente en las faenas agrícolas los establecidos en los campos, pues acontece con frecuencia, que en ningún otro día se echa el grano a los surcos y se plantan vides en los hoyos más convenientemente, a fin de que con ocasión del momento no se pierda el beneficio concedido por la celestial providencia.”
(Código de Justiniano, libro 3, título 12, párrafo 2 (3)). 


“El emperador Constantino, en el año 321, fue el primero que ordenó una rigurosa observación del domingo, prohibiendo toda clase de negocios jurídicos, ocupaciones y trabajos; únicamente se permitía a los labradores que trabajaran los domingos en faenas agrícolas, si el tiempo era favorable. Una ley posterior del año 425 prohibió la celebración de toda clase de representaciones teatrales, y finalmente en el siglo viii se aplicaron en todo su rigor al domingo cristiano las prohibiciones del sábado judaico.”


(«Domingo», artículo en el Diccionario enciclopédico hispanoamericano.)
Según el texto Catecismo doctrinal, ​ en 1566 el Concilio de Trento transfirió el descanso al primer día: «Complace a la Iglesia de Dios, que la celebración religiosa del día shabat se debe transferir al Día del Señor: el domingo».


Tiempo antes de Constantino, Ignacio de Antioquía, cristiano de la iglesia primitiva, declara en una carta lo siguiente sobre el día domingo:
“Ahora bien, si los que se habían criado en el antiguo orden de cosas vinieron a la novedad de esperanza, no guardando ya el sábado, sino viviendo según el domingo, día en que también amaneció nuestra vida por gracia del Señor y mérito de su muerte, misterio que algunos niegan, siendo así que por él recibimos la gracia de creer y por él sufrimos, a fin de ser hallados discípulos de Jesucristo, nuestro solo Maestro, ¿cómo podemos nosotros vivir fuera de Aquel a quien los mismos profetas, discípulos suyos que eran ya espíritu, le esperaban como su Maestro? Y por eso, el mismo a quien justamente esperaban, venido que fue, los resucitó de entre los muertos... Absurda cosa es llevar a Jesucristo entre vosotros y vivir judaicamente. Porque no fue el cristianismo el que creyó en el judaísmo, sino el judaísmo en el cristianismo, en el que se ha congregado toda lengua que cree en Dios.”


El emperador Constantino decretó la libertad de culto en el Edicto de Milán en el año 313, pero ya se han visto testimonios de más de 250 años antes de que los cristianos celebraban la Eucaristía el domingo y no guardaban el sábado.
Fuente:
Wikipedia.



Imagen:
Estampa en la que aparece Yahvé descansando sobre la Tierra, en La Biblia en imágenes (1851-1860), de Julius Schnorr von Carolsfeld (1794-1872).
De Julius Schnorr von Carolsfeld - Bibel in Bildern, Dominio público, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=5469717


AE