La Cruz es la base de todos los símbolos de orientación en los diferentes niveles de existencia del hombre, el cordón umbilical jamás cortado en relación al cosmos creador, el recuerdo de nuestro origen, de nuestra esencia espiritual, de nuestra filiación a Dios. Se trata de la definición más clara y sencilla de la encarnación del espíritu en la forma, la cual da lugar a la consciencia, al “yo soy”, al Alma que sabe y ama, el punto de comunicación entre Cielo y Tierra, el eje de la Vida.”
Diana y Karolus
Diana y Karolus
La Cruz es un símbolo universal, pertenece a todas las culturas y a todos los tiempos. No se trata de un símbolo propiamente cristiano como muchos creen, pues en la cuna de nuestra civilización, en Grecia o en Mesopotamia también estaba presente. Asimismo, miles de años antes de la era cristiana, en la India, en Egipto, en China, en las culturas preincaicas de América, o en la Europa Neolítica y en el mundo Celta, siempre fue un símbolo principal. Para comprender el significado de la Cruz, basta con representarla inscrita en un círculo. Sus cuatro ángulos miden 90º, así que, la suma de sus cuatro ángulos alcanza la totalidad que el círculo simboliza, 360º. Esta es la razón matemática de uno de los grandes enigmas de la historia: la cuadratura del círculo. En la simbólica China, se relaciona directamente los 4 lados del cuadrado o los cuatro brazos de la cruz con el centro de la misma, el punto de intersección de sus brazos, que coincide con el centro del círculo, la gran encrucijada, el misterio por resolver, la magia por hallar.
La Cruz es una marca, una señal, una coordenada, un encuentro, un contacto o un cruce entre los dos grandes valores de la existencia: la materia, el tiempo, la limitación –representada por su eje horizontal, femenino-, y el espíritu, el espacio, la libertad –representado por su eje vertical, masculino-. En ella, así, se manifiesta una función de síntesis.
TIPOS DE CRUZ
La Cruz en el Cristianismo
El Cristianismo ha enfatizado el simbolismo de la Cruz a través del episodio de la crucifixión vivida por Jesús. Tal crucifixión, a nivel simbólico, representa la tarea del hombre por desentrañar el mecanismo entre esos dos ejes, logrando -al final su evolución- encontrar el punto en el que se entrecruzan, y sintetizando ambas energías en una. La muerte simbólica en la cruz representa la muerte del hombre de a pie, de la personalidad llana, a merced del espíritu, que encuentra su sitio tomando tierra a través de ese punto central que equilibra fuerzas y sintetiza aprendizajes.
La cruz Griega
Una forma muy temprana de cruz cristiana, la cruz griega o crux cuadrata, precedió a la cruz latina. En ella, los brazos son de igual longitud. Sus orígenes precristianos se remontan a la antigua babilonia, donde simboliaba al dios del Sol, Shamash. En el cristianismo, la cruz griega no representa la crucifixión de Cristo, sino más bien los cuatro puntos cardinales de la Tierra, la expansión del Evangelio en las cuatro direcciones y los cuatro evangelistas (Mateo, Marcos, Lucas y Juan). Una cruz griega inscrita en un cuadrado representa la autoridad temporal de la Iglesia.
La Cruz de TAU
La Tau es el símbolo de la cruz utilizado por los franciscanos, y además significa “sendero” el sendero que conduce al conocimiento. Además es signo de salvación y consagración y por eso ha sido adoptada como un símbolo masónico en el grado del Arco Real. La última letra de alfabeto hebreo representaba el cumplimiento de toda la Palabra de Dios revelada, se llamaba la Tau (Tav en hebreo). Para los cristianos vino a representar la cruz de Cristo como el cumplimiento de las promesas del Viejo Testamento. La cruz como figura de la última letra del alfabeto hebreo, representaba los medios por los cuales Cristo transformaba la desobediencia del “viejo Adán” en la figura de nuestro Salvador como el Nuevo Adán. El tau es el jeroglífico del triunfo, es la forma físico-espiritual, es el cubo místico desenvuelto para representar la cruz ansata, símbolo del espíritu que descendió a la materia, y donde fue crucificado, pero resucitado de la muerte, descansa triunfante en los brazos de su asesino conquistado. Por eso es llamada la “Cruz de Vida”, el símbolo de la resurrección que representa a ambos, al hombre divino crucificado en la cruz de la carne y al hombre mortal ascendiendo hacia el hombre espiritual por medio del cuerpo crucificado.
La tau simboliza la serpiente clavada en una estaca, muerte vencida por el sacrificio, con un sentido misterioso ya desde el Antiguo Testamento. Tau significa también la obra acabada.
La Cruz Celta
La cruz celta guarda una estrecha relación con la cruz solar así como con el profundo significado del símbolo de la cruz en todas las culturas. Representan sus extremos los cuatro puntos cardinales, pero también los cuatro elementos, tierra, agua, aire y fuego así como sus cualidades tradicionales, a saber, seco, frío, húmedo y caliente. Pero los extremos de esta cruz, también están ligados al paso del tiempo, a los ciclos estacionales y a la conexión entre este mundo y Otro mundo por ello es un símbolo de protección. No todas las cruces celtas tienen el círculo exterior, ni los nudos celtas tallados en el interior, estos últimos se los considera como un mero elemento decorativo, aunque hay corrientes que, debido a la complejidad del diseño, consideran que eran ‘sermones’.
SIMBOLISMO Y USO DE LA CRUZ
Según el plano sutil al que se contacta y el grado de iniciación, la cruz representa varias cosas: Como substancia la Cruz irradia una energía beneficiosa.También simboliza el fuego. Todo lo que es cruzado representa el fuego físico y el fuego purificador, redentor. Cuando es radiante, representa la luz.
Cuando se lleva una cruz, no solo se está llevando el símbolo de la iglesia cristiana con el que se le asocia, sino que se trata principalmente de una cierta irradiación. Cada forma transmite una irradiación, una honda. Usándola, por ejemplo, en los objetos, los signos, los símbolos, entonces los consagran y estos se vuelven verdaderos talismanes que transportan un cierto poder que dependerá del poder de quien lo consagró.
La Cruz en su simbología religiosa representa obviamente a la crucifixión, pero en un nivel más profundo representa la auto-entrega, el desapego de todo lo que es la personalidad. Es la ruptura con toda la mecánica de la personalidad, por lo tanto con la rueda de las reencarnaciones. Cuando hay crucifixión de un iniciado, crucifixión cósmica, está completamente liberado del plano de las reencarnaciones. Si vuelve, es sólo para aportar algo, ya no es más para experimentar algo. La Cruz rompe toda relación con el aspecto terrestre, con la manifestación física, porque hay sublimación de las partes inferiores para solo vivir en las partes superiores. Y es en ese sentido que se puede asociar la imagen del fuego, porque esa iniciación corresponde a lo que el fuego es capaz de efectuar de manera oculta en el hombre.
La Cruz no es la representación de Cristo en el esoterismo: a un nivel iniciático es el símbolo de esa liberación, a un nivel energético es el símbolo del fuego de la Kundalini, y a un nivel terrestre es el símbolo del fuego telúrico, el fuego que es eyectado por los volcanes, es el fuego cósmico en su forma más primaria. Todas las iniciaciones son transmitidas por el fuego. Sobre la Tierra se utilizan otros elementos como el agua para el bautizo, pero para las grandes iniciaciones solo se utiliza el fuego y solo la flama es presentada, porque es la energía solar, es el prana solar. El Sol es un astro ardiente y cada vez que uno quiere conectarse con su energía, hay que integrarse a su energía. Más las iniciaciones son elevadas, más esa integración es intensa.
Que encuentres la cruz verdadera. Que el valor te acompañe y en ella te crucifiques. Que así, alcances la Gloria y Resurrección que sólo aquí pueden darse.